
Todo tiene una meta física, estiro mis brazos , ven y cae en el centro de mi espiral y déjalo ser arte, déjalo ser el toque del dolor de un faltante acto….de puerta en puerta busco en el blanco pasillo al guardián de mi sábado santo, de gozo y dolor se escucha el canto como amante unido en el ángulo del espejo....irrazonable lágrima ….¿sonríes siempre así?, pulverizando la tranquilidad, diluyendo el bienestar inocuo.