La noche congela todo, solo viva la mariposa vuela en el “subspace”, absorbe los ruidos la oscuridad, los amortigua, los traga glotonamente…mueca de sonrisa…tengo la vida que resbala en la BOCA de un seminarista arrepentido, la calma de un estúpido que ríe del difuso dolor de barriga del cielo…esperando los próximos nuestros…1,2,3 censo de paz, contemos, en algún momento retornará el sentido….mientras, desvestidos, baila frenética.

Exijo la simplicidad de tu corazón, paseas frenética en el pasillo de los preparativos…no soy un blasfemo…lames ávida el polvo de mi paciencia, el colmo de mi memoria decapitada…piel quemada…tu ausencia parte el filo del universo, ¿porqué cierras esa ventana?...¿no ves que por allí entra tu luz?

Sobre el balcón cae el ruido, los sonidos de la dormida luz en la terraza…dulce viento…tras los carteles asechar la puntualidad, tu eternidad en cada fracción, bordeando el largo muro olvido las fechas…hay espacios…articular el esfuerzo voluble de abrir la BOCA, es un relativo absoluto “TU”…mientras en el fondo Charly nos recuerda que “…él nunca avanza camina de costado, él tiene miedo a la gente…” animo el vuelo de los aromas.